Por Armando Maya Castro
Los diputados del Partido Acción Nacional votaron en bloque a favor de la reforma del artículo 24 constitucional |
El Congreso de Jalisco
aprobó el pasado 9 de mayo la reforma del artículo 24 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, contribuyendo a elevar a rango
constitucional la libertad de convicciones éticas. Al amparo de esta nueva
libertad constitucional se convalidará, para regocijo de los grupos
proabortistas, la interrupción del embarazo.
El Partido Acción Nacional
(PAN), que hasta el 15 de diciembre de 2011 se había caracterizado por su lucha
a favor de las mujeres embarazadas y sus acciones en contra del aborto, se
granjeó con su voto en bloque a favor de la reforma del artículo 24, la
simpatía, reconocimiento y gratitud de los grupos proabortistas, que se
encuentran entre los que pidieron que se incorporara a nuestra Carta Magna el
término libertad de convicciones éticas.
La versión estenográfica de
la sesión ordinaria del jueves 15 de diciembre de 2011, relativa al dictamen
con proyecto de decreto que reforma el artículo 24 de la Constitución Política
de los Estados Unidos Mexicanos, revela que la libertad de convicciones éticas
fue propuesta por la diputada Enoé Margarita Uranga Muñoz del PRD, en los
siguientes términos: “Hay modificaciones a todo el artículo 24, básicamente
porque ha quedado fuera uno de los elementos fundamentales de la laicidad y es
el que se refiere al de la libertad de las convicciones éticas. La posibilidad,
de que acompañado del Estado laico, quede establecido que la moral de cada uno
de los pobladores de este país no le pertenece a ninguna fe, a ninguna
religión, que los principios éticos se fundan a partir de las propias
convicciones individuales y no a partir de los decretos de ninguna verdad
absoluta, venga de donde venga” (http://www.diputados.gob.mx/articulo24/docs/anexo10.pdf).
¿Ignoraban los diputados
federales y locales del PAN la verdadera intención de incorporar en el texto
del artículo 24 constitucional la libertad de convicciones éticas? Por supuesto
que no. Lo sabían porque desde un principio los partidarios de la libertad de
convicciones éticas han argumentado que la penalización del aborto limita un
principio ético fundamental: la libertad individual, y que “mediante una
postura penalizadora y restrictiva sobre el aborto, se le impide a la mujer el
ejercicio pleno de su derecho a la maternidad voluntaria”. Los diputados
blanquiazules sabían que su voto a favor de la citada reforma coadyuvaría a
fundamentar constitucionalmente el aborto.
¿Dónde quedó el PAN de
postura conservadora, que se opuso con firmeza a las reformas aprobadas al
Código Penal y a la Ley de Salud, ambas del Distrito Federal, que
despenalizaban la interrupción del embarazo dentro de las 12 primeras semanas
de gestación? No olvidemos que este organismo político llegó a presentar en
aquel tiempo a cada uno de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación (SCJN) las 14 razones sobre la inconstitucionalidad de la
despenalización del aborto.
Al abandonar su tradicional
lucha, apoyando una reforma que favorece el activismo de los grupos proabortistas,
los legisladores de Acción Nacional renunciaron a su lucha histórica en defensa
de la vida y han hecho una importante contribución para que se institucionalice
el aborto como un derecho.
Lo cierto es que, luego de
su aporte a la consumación de la reforma del artículo 24 constitucional, el PAN
no podrá seguir con sus discursos antiabortistas ni exigir con la frente en
alto que el derecho a la vida, desde su concepción hasta su muerte natural, sea
tutelado y protegido por el Estado mexicano.
Hace apenas unos días, algunos
medios de comunicación señalaban que el Partido Acción Nacional se congratuló por
el fallo de los Ministros de la SCJN a favor de las reformas de Oaxaca y
Guanajuato que protegen y garantizan el derecho a la vida desde el momento de
la fecundación. ¿Le creerán al PAN los
mexicanos que vieron a los legisladores de este partido votar a favor de la libertad
de convicciones éticas, la cual se toma como apoyo para justificar el aborto?
La verdad, no lo creo.
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